Ya no se aplaude en los aviones,
Ni se come carne con tomate
¿Qué fue de la canción del verano?
La gente ahora, lee más, escribe más,
pero todo vacío, sin contenido.
No hay poetas viviendo en la agonía,
ni amores que se acaben en un día.
Se ha extinguido el achuchón de abuela.
Exactamente, ¿qué nos queda?
Una duda que flota y nos enreda.
Intento rimar, pero todo es inconexo,
maldita poesía moderna,
me enredo en las sílabas de cada verso.
Prefiero el verso limpio, el alejandrino,
como Arrabal aventó en su torbellino.